Comenzamos el año pasado preguntándonos ¿Qué Euskadi queremos para 2040? Un año  después, presentamos el Cuaderno “Competitividad para el Bienestar de Euskadi 2040” que adjetiviza la Euskadi deseada para el futuro, diseñada en un proceso colaborativo impulsado por el Gobierno Vasco y Orkestra, de manera compartida con el resto de las instituciones vascas, representantes de trabajadores, empresarios y empresas, tercer sector, y personas jóvenes.

He aquí el resultado al que hemos llegado: 

  • • Prospera. Líder en desarrollo industrial competitivo y sostenible. Con una economía próspera y diversificada que garantiza el pleno empleo y la calidad de vida de todas las personas 
  • • Inclusiva. Que empodere, acoja la diversidad y capacite a todas las personas para desarrollarse plenamente en una sociedad inclusiva y equitativa
  • • Verde. Neutra en carbono
  • • Innovadora. Pionera, y en continua transformación 
  • • Comprometida. Un lugar único, que cultiva sus singularidades, y cuenta con una sociedad comprometida a nivel social, cultural, político y empresarial 
  • • Conectada. Corresponsable con el mundo y referente en el plano internacional
 En definitiva, una Euskadi competitiva que apuesta por el bienestar de todas las personas, con corresponsabilidad intergeneracional y de manera solidaria con el resto del mundo.  Un lugar diferenciado, atractivo para vivir y al que contribuir.

 

Euskadi2040.png

 Fuente: Izulain et al. 2023

 

Uno de los principales aprendizajes del proceso ha sido desarrollar una mirada sistémica de la Visión, es decir, tratar hacer compatibles de manera simultánea las diversas dimensiones de esta. Utilizando un símil con el juego del Trivial, el objetivo marcado es conseguir los “quesitos” de todos los colores; no sirve tener mucho conocimiento sobre Deportes (naranja), si no conseguimos también el de Ciencia y Naturaleza (verde) o Entretenimiento (rosa). De la misma manera, no queremos proyectar un futuro para Euskadi sostenible medioambientalmente (verde), pero que no sea próspero económicamente (naranja), y que no repercuta en el bienestar de toda la ciudadanía de manera inclusiva (rosa). 

Sin embargo, aunque pueda parecer sencillo, el proceso nos ha enseñado que son numerosos los conflictos que pueden emerger entre las distintas dimensiones, y que están estrechamente interrelacionadas las unas con las otras. Visualizándolo a través de otro rompecabezas, la dinámica es similar a la de un Cubo de Rubik, donde tratar de construir un lado tiene consecuencias directas en el resto de las caras del cubo, y sólo una aproximación que tenga en cuenta todos los lados resulta en la resolución de este. 
 
Durante el proceso, han surgido intereses legítimos que en ocasiones eran contrapuestos. Han surgido numerosas dicotomías y dilemas, como las siguientes: ¿Cómo podemos compatibilizar competitividad y bienestar? ¿Cómo y por qué avanzar más rápido que otros en sostenibilidad medioambiental si esto puede repercutir negativamente en nuestra prosperidad? ¿Cómo seguimos manteniendo nuestra identidad singular y propia, pero a su somos una sociedad acogedora, abierta y conectada con el mundo? ¿Cómo empoderamos a las personas más vulnerables sin caer en el asistencialismo? 
 
A través del diálogo, hemos conseguido llegar a un entendimiento más compartido sobre cómo aproximarnos a estos dilemas, buscando mínimos comunes denominadores y alejándonos de discursos polarizados. Por ejemplo, tomando la primera pregunta en torno a compatibilizar competitividad y bienestar, que ha sido el enfoque central de la Visión, existían diferentes perspectivas al respecto. Por un lado, un sector de la sociedad consideraba que el concepto de competitividad tenía una connotación negativa inherente, y consideraba que lo importante en una visión compartida de futuro no debía ser llegar los primeros, sino llegar todos y a tiempo. Por otro lado, otro sector de la sociedad mostraba su preocupación por que un modelo orientado al bienestar pudiese generar un acomodamiento de la sociedad, que esperaría que la responsabilidad de generar bienestar residiría exclusivamente en el sector público.
 
En trabajos anteriores de Orkestra, se ha definido la competitividad para el bienestar de la siguiente manera: 
 «El bienestar inclusivo y sostenible es el resultado de un proceso sistémico y dinámico por el que todas las personas que conforman una sociedad tienen cubiertas de forma integral sus necesidades humanas y pueden desarrollar plenamente su potencial como personas, construyendo colaborativamente, entre todos los actores de su comunidad, el futuro que desean para su territorio, de manera sostenible en el tiempo y solidaria con el resto de los habitantes del planeta». 
 
Con ello, la clave para compatibilizar ambas posturas sociales reside en la dimensión del compromiso, en entender la competitividad para el bienestar como un proceso de generación de capacidades colectivas entre todas las personas (sector público, privado, comunitario) y para todas las personas (sin dejar a nadie atrás). 
 
Este es solo uno de los ejemplos de los conflictos y aproximaciones a la resolución que se han dado a lo largo del proceso de construcción de la visión compartida. Pero somos plenamente conscientes de que al llevarlo a la práctica seguirán surgiendo nuevas contradicciones. Por ello, la visión debe entenderse como una brújula que guíe el camino, pero también como una herramienta para la reflexión, con utilidad para observar impactos negativos de una intervención en otras dimensiones y, por supuesto, para identificar sinergias.
 
En caso de que quieras seguir leyendo sobre el proceso de elaboración de la Visión y Retos Euskadi 2040, cómo medimos si estamos consiguiendo los objetivos o no, su relación con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y aprendizajes adicionales, no dejes de consultar el Cuaderno Orkestra “Competitividad para el Bienestar de Euskadi 2040”.
 

miren larrea

Ane Izulain

Ane trabaja como investigadora predoctoral en Orkestra, donde colabora en proyectos entorno al desarrollo territorial y la competitividad para el bienestar inclusivo y sostenible de Euskadi.

Ver perfil completo


mari jose aranguren

Mari Jose Aranguren

Mari Jose Aranguren es la directora general de Orkestra y Catedrática de Economía en la Universidad de Deusto. Es una reconocida experta en el área de competitividad y estrategia territorial, clústeres y redes y el análisis y evaluación de políticas, temas sobre las que ha publicado numerosos libros y artículos en revistas especializadas nacionales e internacionales de impacto.

Ver perfil completo